Saturday, December 03, 2005

Comentarios Sobre la Edificación



por Ricardo Barbetti,
investigador, asesor y educador en cuidado del ambiente

Todo esto sería muy bueno que lo entienda una cantidad de funcionarios y empresarios que creen que lo único que importa son los negocios. Algo puede ser muy "buen" negocio y ser malísimo en todos sus otros aspectos, por ejemplo: tráfico de drogas, "trata de blancas", secuestrar y pedir rescate, tráfico de armas de guerra... se entiende que con que algo "sea negocio" no es suficiente para que sea bueno, hay que considerar muchas otras cosas.
(Nota: Muchos arquitectos y constructores intentan sobrevivir con ganancias que casi no superan a los costos, otros que ganan mas de lo necesario para estar bien se dedican a ganar todavía mas, muchas veces con poca ética. En lo que sigue no criticamos a los primeros, sí a los segundos)
Sabemos que la arquitectura es un logro importante de la humanidad y que los techos sirven para proteger del frío, la lluvia y el sol, las veredas nos salvan de caminar en barro y entre plantas espinosas, las paredes protegen del frío, el viento y la curiosidad de otros, y que los edificios pueden ser muy hermosos. Todo esto ni hace falta decirlo.
Pero pocos se dan cuenta que para estar bien necesitamos respirar aire puro, estar en paisajes naturales con árboles, ver el cielo y el horizonte, y por eso demasiada edificación nos hace muy mal a todos, hasta a los que ganan muy bien con eso. Para explicar porqué es así, escribí lo que sigue.
Debería ser evidente que es bueno y es NECESARIO para los humanos:
- Estar lo más posible en el paisaje natural, junto con sus habitantes no humanos: plantas, animales silvestres, ríos, montañas... no sobre cemento, ladrillos, vidrio, acero, plástico... porque entonces se olvidan de cómo es el mundo natural y de cómo son ellos mismos, y necesitamos conocer y cuidar el mundo natural para poder ser realmente humanos; si no, nos podemos transformar en nada mas que engranajes del comercio y la industria, productores y consumidores, "recursos humanos", cosas para ser usadas.
- estar lo mas posible bajo el cielo abierto o a la sombra de árboles, no tapados lo más posible con techos, porque entonces no ven el cielo y no tienen sol ni renovación del aire.
- caminar sobre la tierra blanda, el césped, no estar obligados a estar lo más posible sobre pisos duros, porque entonces no conocen desde chicos la tierra y el pasto, y por eso les parece que la tierra y el pasto son sucios, y les dan miedo. Caminar sobre pisos duros daña los pies y la columna vertebral, caminar sobre tierra y pasto les hace bien. Los pavimentos hacen aumentar las inundaciones porque no absorben la lluvia.
- tener libertad de vista y movimiento en todas direcciones, ver el paisaje natural, el horizonte, no estar rodeados lo más posible con paredes, estrangulados con paredes (sería como una boa "constructor") porque entonces se renueva menos el aire y no ven el horizonte y desarrollan miedo al espacio abierto y lo desprecian, se acostumbran al encierro y llegan a desearlo, siendo entonces fuente de trabajo para arquitectos y constructores... de cárceles.
La civilización moderna es cada vez mas como una cárcel y hace que seamos cada vez más como presidiarios que le tienen miedo y desprecio al afuera. Esto se ve cuando, en coche por el campo, alguno dice "¡No hay NADA!", porque le parece que lo que no conoce (el paisaje viviente, la naturaleza) no existe, lo único que considera que es "algo" es lo artificial: calles, edificios, patios y máquinas, lo seco y cuadrado, rígido y sin vida. Todo esto hace que el mundo sea cada vez mas así. Pero un mundo sin vida es un mundo sin humanos.
Eso no es progreso ni crecimiento, es necesario darnos cuenta que vamos en una mala dirección, y cambiarla:
- en vez de encerrarnos lo más posible, dejar lo más posible terreno libre, con plantas, con animales silvestres libres en paisajes naturales completos, sanos, con ríos y arroyos curvos y sin entubar en vez de canales y acequias rectos, caminar sobre el pasto blando en vez de sobre cemento duro, estar en paisajes llenos de sorpresas, belleza y aventuras, no ángulos rectos, todo seco y duro, patios, baldosas y paredes repetidas millones de veces.
Los parques y plazas deben ser lo más posible tierra y plantas, no millones de toneladas de cemento, ladrillo y baldosas.
Todo esto debe ser impulsado y ser obligatorio por leyes y reglamentos que ayuden a todos a hacerlo.
Este cambio puede ser muy rentable. Y únicamente puede dar resultados muy buenos para la felicidad y la salud de todos, hasta para los que todavía no se dieron cuenta y creen que no les conviene
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